domingo, 7 de enero de 2007

Características generales y clasificación de los marsupiales.

Marsupiales:

Los marsupiales (Marsupialia) son una subclase de mamíferos terios. Se caracterizan por desarrollarse muy poco en el interior de la madre y completar gran parte del crecimiento agarrados al exterior del cuerpo.


Características generales:

Son animales vivíparos, con un periodo de gestación muy corto (de 10 a 14 días) y no poseen verdadera placenta. Las crías nacen en un estado de desarrollo muy primitivo y lo complementan en la bolsa ventral o marsupio. En la primera fase, las crías viven agarradas a los pezones y luego libres en el marsupio. En algunas especies el marsupio falta y entonces la madre suele transportar a las crías durante mucho tiempo sobre el dorso.

El aparato genital es característico, con un útero doble y un pene a veces bífido con un escroto extraabdominal.

Se caracterizan también por tener una sola dentición. El tipo de alimentación es muy variado dentro del grupo, ya que se encuentran tanto especies de hábitos omnívoros, como herbívoros e incluso carnívoros (insectos, aves y mamíferos).

La mayoría de las especies de metaterios habitan en Australia, islas de la Polinesia y Molucas, y solamente unas pocas en América del Sur.

Durante el cretácico eran los mamíferos predominantes en todos los continentes; en el Eoceno fueron sustituídos por los mamíferos actuales (placentados). Pero, al quedar Australia separada del resto de los continentes y no existir competencia con los mamíferos placentados.

Representantes característicos son el canguro, la zarigüeya, el lobo marsupial, el koala, el opósum y el diablo de Tasmania.

Un ejemplo es el canguro:

Un canguro es cualquiera de los tantos grandes macrópodos (la familia de los marsupiales que incluye también a los walabíes, canguros de árbol y walarus con 45 especies en total). El término canguro es a veces utilizado en un sentido más amplio para referirse a todos los miembros de la familia de los macrópodos.

Existen tres tipos de canguros:

-Canguro rojo (Macropus rufus)

-Canguro gris oriental (Macropus giganteus)

-Canguro gris occidental (Macropus fulinginosus)

Los canguros poseen grandes y poderosas patas traseras, grandes pies diseñados para saltar, una cola larga y musculosa para mantener el equilibrio y una cabeza pequeña. Los canguros son hervíboros, alimentándose de pasto y raíces. Todas las especies son nocturnas y crepusculares, usualmente pasando el día en quietud y alimentándose durante las tardes y noches frías, generalmente en grupos.

Popularmente los canguros son conocidos como el animal más representativo de Australia. Como tal, es muy común encontrar canguros en juguetes y souvenirs del continente.

La taxonomia de los marsupiales es la siguiente:


Categoría Taxa Descripción
Reino Animalia Animales: Sistemas multicelulares que se nutren por ingestión.
Subreino Eumetazoa Animales con cuerpo integrado por dos o más lados simétricos.
Rama Bilateria Cuerpo con simetría bilateral con respecto al plano sagital.
Filo Chordata Cordados: Animales con médula espinal, o cordón nervioso.
Subfilo Vertebrata Vertebrados: Cordados con columna vertebral.
Superclase Gnathostomata Vertebrados con mandíbulas.
Clase Mamalia Mamíferos: Poseen pelos en la piel.
Subclase Metatheria Marsupiales: Mamíferos Aplacentarios.

Implicación veterinaria en los marsupiales



Desde el punto de vista científico y trás los estudios realizados acerca de las técnicas de análisis multivariado , se presentan las relaciones de similitud de los tres géneros y las siete especies de Abderitidae, una extinta familia sudamericana de marsupiales con molariformes de tipo plagiaulacoideo. Asimismo, se discuten la paleoecología y las probables causas de extinción de estos marsupiales. Para el análisis multivariado se consideraron como taxones terminales todas las especies de la familia, empleándose dieciséis caracteres mandibulares y dentarios, de los cuales once fueron cualitativos y cinco cuantitativos. Los resultados del análisis multivariado: 1) concuerdan con los agrupamientos supraespecíficos previamente conocidos; 2) indican que los géneros Abderites y Pitheculithes se vinculan a través de las especies A. meridionalis y P. chenche; 3) indican que Parabderites se relaciona con el grupo Pitheculithes+Abderites a través de las especies Parabderites minusculus y Pitheculithes chenche; y 4) señalan que los especímenes determinados como Parabderites sp. están más estrechamente vinculados con P. bicrispatus que con P. minusculus. Finalmente, a partir de las evidencias paleoecológicas disponibles (riqueza específica y abundancia relativa, dieta, hábitos y tamaño corporal) se infiere que: 5) los tres grupos de marsupiales con molariformes de tipo plagiaulacoideo registrados en América del Sur (i.e., Polydolopidae, Palaeothentidae y Abderitidae) tuvieron similares requerimientos ecológicos; 6) los Polydolopidae fueron reemplazados oportunísticamente por los Palaeothentidae y Abderitidae; 7) la extinción post-Friasense de los Palaeothentidae y Abderitidae estuvo fundamentalmente dirigida por causas físicas más que biológicas, marcando esto una notable diferencia con las aparentes causas de la declinación y subsecuente extinción de los similarmente adaptados multituberculados y plesiadapiformes en América del Norte

viernes, 5 de enero de 2007

Enfermedades padecidas por los marsupiales











Los marsupiales pueden padecer multiples enfermedades siendo, entre ellos, unos son mas inmunes a otros dependiendo de la especie, por ejemplo el conocido Koala es un animal con un sistema inmunitario muy frágil que les hace propensos a todo tipo de problemas como enfermedades respiratorias, digestivas y urogenitales, con la posibilidad también de padecer úlcera de estómago, cáncer, deshidratación, atrofia muscular, garrapatas, estrés, clamidia e incluso pueden morir por el desgaste de sus dientes cuando están viejos.

Pero hablando en general de los Marsupiales y sus enfermedades podemos hablar de distintas enfermedades como pueden ser, la clamidia, malaria, filariasis, tifus, fiebre amarilla y dengue, esta última muy repartida por toda oceanía.

Si nos centramos en estas enfermedades podemos observar sus características y peculiaridades que de una en una hiremos señalando seguidamente.
Clamidia: Las clamidias o chlamydia son microorganismos procariotas con las siguientes características:

Tamaño: Son de muy pequeño tamaño, incluso más pequeño que las bacterias por lo que se considera que se encuentran entre los virus y las bacterias. Forma: Tiene forma esférica.


Forma de vida: Son parásitos intracelulares obligados de las células de los vertebrados. Al poseer esta característica escapan a menudo del sistema inmunitario. Su ciclo de desarrollo adquiere dos formas: el corpúsculo elemental y el corpúsculo reticulado o inicial, que representan la forma extracelular e intracelular del parásito respectivamente.


Malaria: Es una enfermedad no contagiosa, provocada por un protozoário ( plasmodium). Es transmitida por la picadura de la hembra de un mosquito (Anopheles), que necesita de la sangre, que succiona con la picadura, para incubar sus huevos, y que pica principalmente entre la puesta del sol y el amanecer.

Filariasis: Filariasis es la enfermedad causada por la infección de filarias, nemátodos del orden Spirurida, superfamilia Filarioidea, que son transmitidos en forma de larva o microfilaria a los vertrebrados por un artrópodo, generalmente un mosquito o mosca, luego de lo cual las larvas se localizan adecuadamente para convertirse en adultos.

Tifus: Por la picadura de vários tipos de insectos (ácaros, pulgas, garrapatas y piojos). Hay diferentes tipos:


Tifus exantemático epidémico: producido por Rickettsia prowazekii.

Tifús endémico murino: Pruducido por Rickettsia typhii.p1091;с.


Dengue: El dengue es una enfermedad febril de comienzo súbito, epidémica de origen vírico y transmitida por el mosquito Stegomyia aegypti o Aedes aegypti y con menor frecuencia por el Aedes albopictus o mosquito tigre.

Estos mosquitos pican durante todo el día, preferentemente por la mañana temprano y en el ínicio de la noche. En las junglas del sudeste asiático hay un ciclo silvestre de la enfermedad adonde son los monos que sirven de reservorio para el virus. El dengue es una enfermedad vírica febril y aguda que se caracteriza por comienzo repentino. La fiebre puede durar de tres a cinco días (rara vez más de siete días, y suele ser difásica). Cefalea intensa, mialgias, artralgias, dolor retroorbital, anorexia, alteraciones del aparato gastrointestinal y exantema rubeliforme. En algunos casos aparece tempranamente eritema generalizado.
Para la fecha en que la fiebre muestra defervescencia suele aparecer una erupción maculopapular generalizada, pruriginosa de duración corta.
En la sección correspondiente a dengue hemorrágico se presentan las infecciones por dengue que presentan un incremento en la permeabilidad vascular, manifestaciones hemorrágicas extraordinarias y ataque de órganos específicos.
En cualquier momento durante la fase febril pueden aparecer fenómenos hemorrágicos de poca intensidad, como petequias, epistaxis o menotrorragia. En las personas de piel oscura la erupción a menudo no es visible.
La recuperación puede acompañarse de fatiga y depresión duraderas. Son frecuentes la linfadenopatías y la leucopenia con linfocitosis relativa; con menor frecuencia se observan trombocitopenia (menos de 100 000 plaquetas por mm3) e incremento de las aminotransferasas.
Las epidemias tienen carácter explosivo, pero la tasa de letalidad es muy baja, siempre que no aparezca el dengue hemorrágico.
El diagnóstico diferencial incluye todas las enfermedades epidemiológicamente importantes incluidas bajo los rubros de fiebres víricas transmitidas por artrópodos, sarampión, rubéola y otras enfermedades febriles sistémicas. Con técnicas auxiliares en el diagnóstico pueden utilizarse las pruebas de inhibición de la hemaglutinación, fijación del complemento. ELISA, captación de anticuerpos IgG e IgM, así como las de neutralización. El virus se aísla de la sangre por inoculación de mosquitos o por técnicas de cultivo celular de mosquitos o vertebrados y después se identifican con anticuerpos monoclonales con especificidad de tipo.


Fiebre amarilla: Es transmitida por la picadura del mosquito Aedes aegypti y otros mosquitos de los generos Aedes, Haemagogus y Sabethes. El período de incubación se sitúa entre los 3 y los 14 días. La duración de la enfermedad en caso de curación es de una a dos semanas. Tras el período de incubación cabe distinguir dos formas clínicas: la leve y la grave o clásica, registrándose también formas de gravedad intermedia. Forma leve. Es poco característica y sólo se sospecha en zonas endémicas y especialmente durante las epidemias. Comienza bruscamente con fiebre elevada, escalofríos y cefalea. Pueden existir, además, mialgias, náuseas y vómitos. Suele durar 1-3 días y curar sin complicaciones. Forma grave o clásica. Tras un período inicial similar al anterior, en el que pueden existir además epistaxis y gingivorragia, se produce un descenso febril (remisión). A continuación reaparece la fiebre, se instaura ictericia (100% de los casos) y puede aparecer insuficiencia hepática o renal con proteinuria (90%) y agravamiento de la diátesis hemorrágica, con epistaxis abundantes, gingivorragia, punteado hemorrágico en el paladar blando y hematemesis de sangre negra y coagulada (vómito negro) (20% de casos). Un signo clínico clásico es la existencia de bradicardia relativa aesar de la fiebre elevada (signo de Faget). Al inicio existe leucopenia con neutropenia. Los restantes parámetros bioquímicos traducen sólo la existencia de fallo orgánico único o múltiple (generalmente hepático o renal) y deshidratación (alteraciones iónicas y del equilibrio acidobásico).El diagnóstico en zonas endémicas suele establecerse a partir de los datos clínicos. La confirmación del diagnóstico requiere la demostración de un ascenso al cuádruple en el título de anticuerpos en un paciente sin historia reciente de vacunación frente a la fiebre amarilla y si se han podido excluir reacciones cruzadas frente a otros flavivirus, o la demostración del virus de la fiebre amarilla, sus antígenos o genoma en tejidos, sangre o líquidos biológicos.